Bagua,
Bagua y siempre Bagua.
Renatto
Bautista Rojas
Licenciado
en Ciencia Política por la Universidad Nacional Federico Villarreal.
Publicado en May Neim Presenta, con fecha 24/09/2016
El pasado jueves 22 se
dictó la sentencia sobre el caso de Bagua. Los inculpados por el Ministerio
Público (dirigentes nativos) fueron declarados inocentes.
Increíble esta
sentencia que genera un pésimo precedente contra el Estado de Derecho ¿por qué?
Primero, porque se da
por entendido que es bueno tomar las carreteras (que son de propiedad de todos,
los peruanos); y por consiguiente, impedir el libre tránsito de los peruanos
como del comercio terrestre. Lamentablemente, la práctica de tomar carreteras,
se ha vuelto normal y típica. Vivimos la normalización de la anormalización y
de lo incorrecto, es el reino de las protestas y de la toma ilegal de
carreteras.
Segundo, porque queda
impune el asesinato de 23 valerosos policías, lo escribo en mayúsculas, el
ASESINATO de POLÍCIAS. Ahora, esta sentencia justifica que por la “interculturalidad” y la “ecología” se asesine a quiénes
resguardan el orden y la seguridad nacional; es decir, reina el borrón y cuenta
nueva.
Les recuerdo que la
confrontación en Bagua, se dio, por la intriga y el azuzamiento de la bancada
humalista, sobretodo, de la entonces congresistas humalistas Marisol Espinoza
(hoy de las filas, de Alianza para el Progreso) y Yaneth Cajahuanca. Estas
políticas fueron a la misma localidad de Bagua y azuzaron a la población, jamás
demostraron que la implementación del TLC, significaría la pérdida de sus
propiedades. Además, el humalismo jugó a desestabilizar al gobierno de Alan
García. Las agendas de la esposa de Humala Tasso, demuestran que Bagua fue una
confabulación desestabilizadora humalista contra el gobierno aprista y que
tenía el beneplácito de la dictadura chavista. La izquierda gatopardista juega a
desestabilizar a los regímenes constitucionales y democráticos.
Así como Evo Morales,
en el año 2003, desestabilizó al gobierno constitucional de Gonzalo Sánchez de
Lozada, con las protestas sobre la exportación del gas boliviano, lo mismo
planeó el humalismo al desestabilizar al gobierno y forzarlo a una renuncia (lo
cual, no sucedió).
Tercero, esta sentencia
genera un precedente positivo para la izquierda gatopardista peruana, al dejar
indefensa a nuestra policía en la lucha por el restablecimiento del orden
público en sendas protestas violentistas y con tufo extremista.
La izquierda
gatopardista está feliz porque esta sentencia les permite, seguir hablando, del
mal llamado “terrorismo de estado, de
esta manera, equiparán los crímenes del terrorismo del Partido Comunista del
Perú - Sendero Luminoso, con los sucesos de Bagua.
Me permito un breve
paréntesis, para manifestar mi total repudio a la construcción de un mausoleo
para los criminales terroristas de Sendero Luminoso en el distrito de Comas,
como mi repudio a la marcha realizada por los familiares de estos genocidas y
terroristas.
Los integrantes y
miembros de la directiva de la autodenominada “Asociación de Familiares de Presos Políticos, Desaparecidos y Víctimas
del Genocido (Afadedevig)”, deben ser encarcelados por el delito a la
apología del terrorismo. Estos herederos de genocidas marxistas deben estar en
la cárcel, su marcha es una afrenta a 30 millones de peruanos y al Estado de
Derecho.
Se imaginan que en
Berlín o Roma, los bisnietos de los jerarcas nazis y fascistas hagan una
marcha, por la “honra” y la “lucha” en la 2da Guerra Mundial, de
seguro, estos familiares irían a la cárcel en ese mismo momento.
Manifiesto mi plena
solidaridad con los familiares de los 23 policías vilmente asesinados; y
sobretodo, con la familia del mayor Bazán, que hasta el día de hoy, su familia
no puede enterrar cristianamente el cuerpo.
Que sus muertes no
queden impunes, no al borrón y cuenta nueva.