miércoles, 22 de abril de 2020

Reflexiones en tiempo de pandemia: El odio y la envidia


Renatto Bautista Rojas
Magíster en Gestión de Políticas Públicas y Licenciado en Ciencia Política por la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV)

Publicado en Mundiario con fecha 22-04-2020

El 17 de abril, se conmemoró un año de la partida física de Alan García –dos veces Presidente Constitucional del Perú- quien prefirió la muerte antes que el escarnio y la humillación personal, familiar y partidaria. Ese día, luego de realizar el EN VIVO, en Instagram, con mi amigo y compañero, de ideales políticos, Martín Bernabé leí un excelente artículo titulado Las Metamemorias de un demócrata indoamericano de autoría de Claire Viricel.
Este artículo, como la misma vida política de Alan García, me llevó a unas reflexiones que las comparto con todos.
Primero: En toda la historia documentada del Perú siempre el odio y/o la envidia nos dividió en dos terribles bloques, no haré juicios de valor histórico, pero lo concreto fue la existencia de estos bloques: Atahualpa vs Huáscar, Pizarro vs Almagro, leales a la Corona española vs los encomenderos, independentistas vs realistas, Gamarra vs Santa Cruz, Castilla vs Vivanco, Piérola vs Cáceres, Leguía vs civilistas, APRA vs antiapristas sumado a que, en la mayoría de esos casos, la división de este odio confrontacional “hasta la muerte” sucedió también entre norte y sur del Perú. En lugar de avanzar como Nación, en los problemas sociales que sabemos, se sigue en ese vil odio y envidia que es una constante en la historia peruana desde antes de la caída del imperio incaico. ¡Terrible! Parece que algunos, por no decir muchos, necesitan envidiar y odiar al más cercano. ¡El odio es su oxígeno!
Segundo: Claire Viricel me dice: “Los mejores son odiados, Renatto. Sobre todo en los países donde hay escasez de todo, todo.”
Es cierto porque, sin ser psicólogo, la envidia y el odio son los sentimientos nacidos en pobres almas que no pueden aceptar que el compañero de aula, colegio o universidad, o el conocido de años o el vecino, le vaya mejor profesionalmente que a los otros. La envidia y el odio son los sentimientos del fracaso, son la manifestación de tirria de quien no acepta que existen soles que brillan. Ni que decir en países, como el Perú, donde la escasez de lo intelectual es una triste realidad desde el mundo de la academia y/o letras hasta el mundo político donde, de todos los ex presidentes de los últimos 40 años, el más culto era Alan García, tal vez esta razón haya sido la más poderosa de tanta envidia y odio contra él. En un país de mentes inferiores, a un coeficiente intelectual (C.I.) mayor que 100, no se le admira a la mente culta y lúcida, se le envidia, se le destruye con la mayor ponzoña vista.
Tercero: La envidia y el odio pueden nacer de personas que se sienten fracasados en el aspecto familiar, se perciben como malos esposos o padres de familia, en el aspecto profesional, no se sienten realizadas son los eternos bachilleres que tienen que mentir que sí tienen el título profesional. Es decir, es el sentimiento nacido de la derrota personal, pero como no se acepta así mismo, lo tiene que volcar con el prójimo que le va mejor en la vida. Lo estratega o lógico sería que se vuelvan amigos de quien le va bien, pero no, estos pigmeos destilan lo más oscuro de sus almas.
Cuarto: En la historia universal, los inmortales han sido envidiados y odiados. El gran Julio César fue odiado por Pompeyo, su otrora yerno y aliado político, luego fue odiado por las manos que lo asesinaron como Bruto y Casio. Su heredero político, el joven Octavio, que luego sería el primer emperador romano llamado Augusto, fue odiado a muerte por Marco Antonio, que jamás aceptó que él fuera el heredero de Julio César, ni que decir de Cleopatra que quería entronizar al pequeño Césarion en el trono de Alejandría y Roma, a la vez. El mismo Jesucristo fue envidiado y odiado por los sumos sacerdotes judíos Anás y Caifás que hicieron de todo para que lo crucificaran, no comprendieron que su mensaje trascendía este mundo. Luego tenemos al famoso Carlos V envidiado y odiado por todos sus contemporáneos desde Enrique VIII  de Inglaterra hasta Francisco I de Francia. Ellos no podía soportar que un joven Carlos V fuera Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Rey de España, soberano de los Países Bajos, del Milanesado y de Nápoles, sumado a que era el rey en su imperio ultramarino en las Américas destacando, por sus riquezas, los virreinatos de Nueva España y Perú. Luego recuerdo los odios enfermizos que padeció el Emperador Napoleón por casi todos los europeos de comienzos del siglo XIX que les dolía ver a un corso en el trono francés y que llegó a dominar casi toda Europa. Ni que decir de las envidias y odios que sufrió Sir Winston Churchill dentro del partido Conservador como de sus rivales en el laborismo. El único británico, que mucho antes de la Segunda Guerra Mundial, sabía de la gran amenaza que representaba el nazismo, era ridiculizado, hasta por sus propios “compañeros” de partido, como un “extremista” o “loco” o  “radical”. Luego de la invasión nazi hacia Polonia, renuncia Chamberlain y Churchill asume el gobierno en la hora más difícil de la historia británica cuando el mundo entero se jugaba la libertad ante un totalitarismo criminal como el nazismo. Así puedo escribir varios párrafos sobre inmensas personalidades que padecieron envidias y enfermizos odios de una gentuza que jamás tendrá la gloria de la historia. En el Perú, recuerdo dos casos quienes fueron Víctor Raúl Haya de la Torre que sufrió tal odio, que intentaron asesinarlo a él como al APRA de todas las maneras posibles, fue un holocausto peruano como escribió Luis Alberto Sánchez en el libro Perú: Retrato de un país adolescente. Haya de la Torre fue tan odiado que recién de anciano, le dejan tener un cargo público como Presidente de la Asamblea Constituyente. Para la gentuza no le importaba que Haya representaba el 35% de peruanos, los tenían que marginar como si fuera los siete jinetes del Apocalipsis. El segundo caso es de Alan García, el presidente peruano que generó tremendas adhesiones como unos odios enfermizos. Sus adversarios jamás le perdonaron haber reflotado al APRA, en sus años más difíciles que fue luego de la muerte de Haya, ni ser dos veces Presidente Constitucional en dos siglos diferentes. Son tan mezquinos con Alan García que no le reconocen que fue un buen orador ni que hizo un magnífico segundo gobierno ni que fue un intelectual de fuste, autor de una veintena de libros, importantes para el análisis como Pizarro: El rey de las barajas y Confucio y la Globalización.
Así son estas pobres almas, llenas de envidia y odio, pero esos pigmeos jamás comprenderán el peso de la historia como sí lo comprendieron Alejandro Magno, Julio César, Augusto, Carlos V, Napoleón, Churchill, Haya de la Torre y García.
La historia olvidará a los que vivieron odiando, tal vez sea su justo castigo.

miércoles, 15 de abril de 2020

¿Qué reflexiones nos deja la pandemia del coronavirus en el Perú? Parte 2


Renatto Bautista Rojas
Magíster en Gestión de Políticas Públicas y Licenciado en Ciencia Política por la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV)
Publicado en Mundiario con fecga 15-04-2020

Hace una semana escribí un artículo con el mismo título, pero que es la parte 1 porque la pandemia del virus chino avanza con terrible fuerza en el Perú, mi país.
Primero: Desde febrero, que todos sabíamos el avance de la pandemia en Europa, se debió cerrar todas las fronteras peruanas como mecanismo de prevención. No hacerlo fue una irresponsabilidad del gobierno de turno.
Segundo: Según las cifras oficiales del Ministerio de Salud peruano, hay 10, 303 peruanos infectados y 230 peruanos que murieron. Estas muertes causan dolor y nunca debieron pasar. ¿Existe algún responsable político por estas muertes? Sí, el Ministro de Salud que debe renunciar.
Tercero: La “propuesta” del “científico social” Matuk fue un tremendo fiasco. Este ciudadano no conoce nada de la realidad social peruana. ¡Jamás ha pisado un Asentamiento Humano! Debe renunciar a ser integrante de esa Comisión porque ha generado dolor y muerte en hogares peruanos. Además, debería estar inhabilitado de trabajar para el Estado de por vida.
Cuarto: Se demuestra que las llamadas pruebas rápidas no son efectivas. Por consiguiente, las pruebas moleculares son las más efectivas para detectar si se está enfermo del virus chino. Ayer, el congresista Luna Morales escribió, en sus redes sociales, que probó dos pruebas rápidas y salió negativo, pero con la prueba molecular se confirmó que padece de esta terrible gripe. La realidad supera la ficción. Parece que el Ministro de Salud no lo entiende. Otra razón para que renuncie ante tremendo horror.
Para cerrar el tema de la pandemia y su incidencia en el Perú, leo redes sociales de peruanos contemporáneos a mi edad, la generación de los veinte y picos, que dicen que luego de levantada la cuarentena, cosa que nadie sabe la fecha exacta, hará la gran fiesta o se irán de compras a grandes tiendas. ¡Están desubicados! Cuando se levante la cuarentena, no todo volverá a ser igual. No dudo que lo último en abrirse serán los cines, teatros y, sobretodo, discotecas. Dejen esa vida tan hedonista que lo máximo en la vida no es el orgasmo ni placeres carnales. Desde que tengo uso de razón, siempre me he negado a creer que somos solo carne y hueso, no deseo entrar en un debate filosófico, pero el ser humano tiene alma e inteligencia. Por eso, somos homo sapiens sapiens y hemos formado civilización desde hace más de 6 mil años. Todos debemos llevar una vida estoica, nunca es tarde para hacerlo, ya que la juventud, que aún tenemos, no es eterna. ¡Reflexionen!
Finalmente, los invito al EN VIVO, en Instagram, que haré el viernes 17 a las 8pm con mi amigo y compañero, en ideales políticos de justicia social y democracia social, Martín Bernabé. El tema es Metamemorias de Alan García, será un homenaje a un político muy culto, a quien conocí, que tuvo el alto honor de ser dos veces Presidente Constitucional del Perú. Mi cuenta de Instagram es renattobautistar para quienes deseen escucharnos.
¡Será un año de la partida física de Alan García!

jueves, 9 de abril de 2020

¿Qué reflexiones nos deja la pandemia del coronavirus en el Perú?


Renatto Bautista Rojas
Magíster en Gestión de Políticas Públicas y Licenciado en Ciencia Política por la Universidad Nacional Federico Villarreal
Publicado en Mundiario, con fecha 09-04-2020

Primero: Al momento que escribo este artículo, 121 peruanos han muerto por el virus chino. Esas muertes no debieron ocurrir y lamentablemente, por la mala gestión pública del actual gobierno, mas peruanos fallecerán.
Lamento el dolor que muchas familias peruanas tienen ante estas muertes que jamás debieron ocurrir. 
Segundo: Invito a mis amables lectores leer las estadísticas del diario estadounidense The New York Times que demuestra que somos el cuarto país latinoamericano en infectados por el virus chino y somos el tercer país latinoamericano en fallecidos por esta cruel enfermedad. Las estadísticas publicadas en un diario estadounidense demuestran que el actual gobierno está administrando mal la actual pandemia. Pueden decirme que la cuarentena es una medida necesaria, pero no fue inventada por el gobierno, mas bien es implementada por la mayoría de gobiernos en el mundo.
Tercero: No dudo que el virus chino será el mejor pretexto para que el gobierno se mantenga luego del 28 de julio del 2021. El actual Parlamento, lleno de inexpertos y tibios, jamás impediría que el régimen siga en una senda de autocracia.
Cuarto: Percibo que el gobierno nos miente sobre las cifras que entregan diariamente sumado que la cantidad de pruebas -diarias- no es la cantidad requerida para demostrar el 100% de peruanos infectados.
Quinto: Cada día que pasa, me da más seguridad en creer que este virus fue creado en laboratorios chinos como venganza de la dictadura totalitaria china hacia los Estados Unidos que ganó la guerra comercial, del año pasado, y por las sanciones a la empresa china Huawei. No creo las estadísticas oficiales de la China comunista porque al ser un régimen totalitario, valga la redundancia nada democrático, oculta todo tipo información. Este régimen totalitario debe pagar caro, no solo en sanciones económicas, la terrible expansión del virus chino en todo Occidente.
Sexto: El gobierno peruano debió cerrar todas las fronteras desde febrero porque era obvio, que tarde o temprano, el virus llegaría a Sudamérica como al Perú. A la larga, todos los gobiernos del mundo hicieron lo que el presidente estadounidense Trump decretó a fines de enero que era el cierre de sus fronteras con China y Europa. ¡De pronto y se volvieron trumpistas!
Séptimo: Sostengo que, ante la muerte de más de 100 peruanos, el actual ministro de Salud, agente político de la franquicia castrochavista peruana llamada Frente Amplio, debe renunciar -por mínima dignidad- lo debería hacer o ser censurado por el Congreso, cosa que no sucederá porque este Congreso está repleto de inexpertos y tibios. Creo que hay mejores, en términos profesionales, médicos que podrían ser Ministros de Salud. 
Reitero a mi amable lector que mis artículos solo representan a mis ideas como a mi pluma, no represento a ninguna colectividad partidaria ni profesional.


jueves, 2 de abril de 2020

Los 15 millones de dólares para capturar a los narco chavistas


Renatto Bautista Rojas
Magíster en Gestión de Políticas Públicas y Licenciado en Ciencia Política por la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV)
Publicado en Estado Internacional con fecha 02-04-2020

Una noticia muy reducida, en el Perú por lo menos, es que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos de América haya puesto una recompensa de 15 millones de dólares para la captura del dictador Maduro y 10 millones para capturar a los jerarcas de la narco dictadura, comenzando por Diosdado Cabello que es equiparable en maldad a Hermann Göring, ministro de la Aviación de la Alemania Nazi.
Ya está demostrado que la dictadura chavista lava el dinero del narcotráfico obtenido por las FARC, en tantos lustros que actuaron en total impunidad. Además, la dictadura chavista depreda el Amazonas, como lo demostró el diario español ABC, para obtener oro de manera ilegal sumado a que se diezma a los nativos. Éso es un crimen y horror, pero si lo hicieran otros, como Trump, ya me imagino el grito que el coro progre haría en todo el mundo. Volviendo con la dictadura chavista, lo interesante de esta situación es que acorrala más a esta cruel dictadura. He leído, que algunos, dicen que los 15 millones de dólares contra el dictador es la “arremetida imperialista”. ¡Tremenda falacia! Porque la defensa de la libertad y de los valores democráticos son universales ante una dictadura que ha empobrecido a la nación otrora más próspera de la región, que ha permitido una diáspora de más de 5 millones de venezolanos, y ha sumado dinero en base al narcotráfico como a la minería ilegal. Desde todos los ángulos, vistos, la dictadura chavista es un régimen tiránico de espantos que algunos castrochavistas peruanos pretenden implementarlo en el Perú, a pesar, de 21 años de horrores de la narco dictadura chavista. Pero, no lo vamos a permitir, el mal no ganará aquí.
La narco dictadura chavista debe caer por la inmensa maldad construida. Estoy seguro que el día que pase este suceso, se escuchará el grito más fuerte de libertad jamás escuchado. ¡Maduro van por ti y tu narco mafia!
Reitero, mi inmensa solidaridad con el hermano pueblo venezolano que lucha por su libertad y que están representados por el Presidente legítimo Juan Guaidó.

miércoles, 1 de abril de 2020

No debe existir límite de edad para ser catedrático


Renatto Bautista Rojas
Magíster en Gestión de Políticas Públicas y Licenciado en Ciencia Política por la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV)
Publicado en Mundiario con fecga 01-04-2020


La actual Ley Universitaria N° 30220 pone un absurdo límite, de 75 años, para ser catedrático en cualquier Universidad peruana. Es algo desproporcionado porque para ser catedrático, según la actual ley, debes tener –como mínimo- grado de Magíster y –mínimo- 5 años como titulado profesional. ¡Seamos justos! Es un despropósito porque se está eliminando, como lamentablemente ha sucedido en las Universidades públicas San Marcos y Federico Villarreal- a catedráticos con amplia experiencia. Por ejemplo: La Facultad de Derecho y Ciencia Política de la Universidad Federico Villarreal ha perdido a dos catedráticos, por el límite de edad, a pesar que ellos se encuentran muy bien salud y son lúcidos como Víctor Taquia Vila, que fue fundador de la Facultad y es especialista en derecho civil y cooperativismo sumado a que fue un exitoso Decano, y a Walter Robles Rosales, especialista en derecho constitucional y exitoso director de la Escuela Profesional de Derecho. ¡Esa experiencia es muy difícil de encontrar! ¿No?
Otro argumento es que somos pocos los peruanos que tenemos el grado de Magíster, no creo que ni llegamos a ser el 5% de la población, sumado a que un sueldo de catedrático no es muy interesante que digamos porque se desalienta a la investigación académica. Seamos, aún más sinceros, existen muchos catedráticos que no escriben libros y eso se ha permitido por muchos lustros.
La solución es que el nuevo Congreso aprueba una ley donde se borre el límite de la edad para ser catedrático y que se estipule que los catedráticos, mayores de 75 años, se hagan exámenes anuales para demostrar que están óptimos para enseñar. Además, ¿por qué no?, en esta nueva ley se permita que los docentes separados, por el límite de edad, sean reincorporados a sus Facultad en la categoría que les corresponda (principal, asociado o auxiliar). Es un pésimo lujo que nos damos, al no contar con catedráticos, mayores de 75 años pero que están bien de salud y son lúcidos. ¡Perdemos valiosas experiencias académicas!
Confió que el Congreso de la República haga propio este reclamo en bien de la Universidad pública peruana.
¡La educación universitaria es lo primero!