domingo, 19 de marzo de 2017

El mito de la imparcialidad de la mediocracia

Renatto Bautista Rojas
Licenciado en Ciencia Política por la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV).
Publicado en May Neim Presenta, con fecha 19-03-2017

Muchos me preguntan, “Renatto, ¿qué es la mediocracia?”.
Es una excelente pregunta porque la mediocracia la defino como el poder fáctico ejercido por los medios de comunicación privados y su influencia sobre la sociedad peruana. Dicha influencia se da a través de la prensa, la radio, la televisión y de las novísimas redes sociales.
La mediocracia se autodefine como “imparcial” e “independiente”. Aprovechan todo espacio para vendernos la idea que son los únicos “independientes” en el sistema político peruano. Artículos, conferencias, entrevistas y libros, son sus mejores herramientas, en lograr tan mentiroso y nauseabundo fin.
Los dueños de los medios como los periodistas (adscritos a dichos medios) saben muy bien la influencia que sus noticias pueden generar en la sociedad peruana; por lo cual, tienen que convencernos que son el último mastín de la libertad.
¿Por qué la mediocracia peruana no es imparcial ni independiente?
En primer lugar, la mediocracia responde a intereses económicos, fácticos y políticos-partidarios de los dueños de dichos medios. Todos tenemos una determinada posición política, absolutamente todos, incluyendo los dueños de dichos medios.
Quien niegue esto, es un fariseo periodístico.
Segundo, ni que decir de los periodistas, al escucharlos, leerlos y/o verlos sabemos que defienden ciertas agendas políticos-partidarias.
Las etiquetas o categorizaciones políticas, el tratamiento desigual de la noticia, la mezcla apropósito de la información y de la opinión, y las generalizaciones, son los grandes males de los periodistas peruanos.  ¡Cero objetividades periodísticas!
Tercero, los directores culturales, periodísticos, políticos y demás categorizaciones representan una agenda política bien clara, ergo, los columnistas de dichos medios, son los amigos de los directores y defensores de dichas agendas – que en algunos casos representan a lobbies, como el abortista y el gay-. ¿Lo van a negar? No pueden porque la realidad los desmiente.
La “imparcialidad” como la “independencia” de la mediocracia peruana es un mito del tamaño del Everest, los peruanos deben saber que tales ideales periodísticos son una quimera porque ellos son y serán agentes políticos y de lobbies poderosísimos, a nivel mundial.
Alguien puede negar que existe un multimillonario estadounidense (de origen judío) que a través del mito de la “filantropía” financia a todos los grupos de las izquierdas gatopardistas, en los cinco continentes. ¡Las marchas contra Trump jamás fueron “actos espontáneos”!
En mi libro Medios de Comunicación y Política en el siglo XXI escribí lo siguiente:
“Podemos afirmar que la influencia del poder mediático es determinante, porque lo preseleccionado es decidido por los propietarios de los medios de comunicación que entregan el material que la sociedad debe pensar y discutir”.
Que este fragmento de mi libro sea una reflexión para todos los peruanos. Hoy, más que nunca, debemos tener los ojos abiertos.

P.D.: Me gustaría leer algún artículo de cualquier periodista o estudiante de periodismo que me responda negando el mito de la imparcialidad de la mediocracia peruana. 

sábado, 18 de marzo de 2017

A cuatro años de la revocatoria


Renatto Bautista Rojas
Licenciado en Ciencia Política por la UNFV
Publicado en Estado Internacional con fecha 18-03-17

El domingo 17 de marzo del 2013, fue el proceso de la revocatoria a la entonces alcaldesa de Lima Susana Villarán y a los regidores de Lima. Como todos recuerdan, la entonces alcaldesa se salvó por un pelito (argot peruano) de ser revocada, pero no veinte regidores, entre ellos diecinueve (19) del grupo de Villarán, entre ellas las hoy congresistas del Frente Amplio, Marissa Glave e Indira Huilca, muy cercanas colaboradoras de la ex candidata presidencial Verónika (Mendoza) Frisch. Sí, la misma que escribió en las agendas de Nadine Heredia, la esposa del ex Presidente Ollanta Humala, donde se comprueba el lavado de activos y la subordinación humalista hacia el Brasil de Lula y la dictadura venezolana de Chávez y Maduro.
Volviendo con la revocatoria, ¿qué nos deja este proceso electoral? Nos reconfirma la nulidad de la degestión de la ex alcaldesa Susana Villarán. Esta degestión no tiene ni una obra emblemática que demostrarnos, al nivel, que la ciudadanía ratifica mi afirmación. Ni el más acérrimo defensor lo puede negar porque sólo hablarán de que pintaron de verde, las escaleras y muros de contención realizadas por  Luis Castañeda, en sus pasadas gestiones (2002-2010).
Hoy, la historia nos da la razón a quienes votamos por el Sí de la Revocatoria porque en el imaginario popular la degestión de Villarán De la Puente es la peor que hemos tenido en Lima, en los últimos 40 años. Me rectificó, la peor en la historia de Lima, desde el Virreinato español.
Además, el caso Odebrecht revela las corruptelas construidas desde el Brasil. Por ejemplo: El publicista de Lula y Dilma está en la cárcel, me parece extraño que el publicista humalista y villaranista Luis Favre (o cómo diablos se llame este marxista) no sepa nada sobre cómo se financió la campaña del Comando del No (Susana Villarán). ¿Qué espera la Fiscalía peruana para citarlo?
Verdad, han pasado cuatro años y Anel Townsend no han dicho, a los nueve millones de limeños, como financiaron la campaña recontra millonaria del No.
¡Qué no nos vengan a sorprender que del sueldo de la entonces alcaldesa, se financiara paneles gigantes y publicidad en canales de señal abierta! Idiotas, no somos los limeños, ex alcaldesa Villarán. ¡Responda!
Ustedes (izquierda gatopardista) que tanto hablan de la moral. ¿Qué esperan para revelarnos quienes financiaron el Comando del No? ¿O será que recibieron donativos de Odebrecht, OAS y Camargo Correa?  
Anel y Susana, nueve millones de limeños esperamos sus respuestas, hoy.
Porque ustedes quieren pasar piola (argot peruano) para volver a postular a la alcaldía en el 2018. ¡No digan que no!

P.D.: En la revocatoria se lució como política tenaz,  la hoy teniente alcaldesa limeña Patricia Juárez Gallegos. Este artículo, en parte, es un justo reconocimiento a Patty Juárez. 

domingo, 12 de marzo de 2017

Marcha peruana: “Con mis hijos no te metas”.

Renatto Bautista Rojas
Licenciado en Ciencia Política por la UNFV.
Publicado en Mundiario, con fecha 05-02-17


El día de ayer, sábado 04 de marzo, participé en la marcha denominada “Con mis hijos no te metas”. Primera vez que participó en una marcha que supera los tintes políticos porque no fue convocada por ningún partido político sino por colectivos sociales.
¿Por qué una marcha denominada “Con mis hijos no te metas”?
El actual gobierno peruano que se supone representa a la “derecha conservadora”, a través del Ministerio de Educación, ha instaurado un nuevo currículo educativo que promueve la ideología de género, en base a la falacia de la “igualdad”.
Ni somos iguales a nuestros padres ni a nuestros hermanos, y éstos siguen con monsergas marxistas, en pleno siglo XXI. Totalmente, contra fáctico.
Este mal llamado concepto de la “igualdad” es originado por el marxismo cultural. En el siglo XXI, ya no se habla de “lucha de clases” sino de la “igualdad de géneros” y con el mito de la “igualdad” quiere “educar” a nuestros niños sobre el “descubrimiento de su sexualidad”. ¡Increíble! ¿Quién explora su sexualidad a los seis años? Nadie.
La Ministra de Educación ha negado la existencia de la ideología de género, pero ésta existe porque promueve la “igualdad” y la aceptación de “todos” los géneros, negando que sólo existen dos géneros: El femenino y el masculino, o se nace mujer o se nace varón, no existe ni existirá el tercer género porque la evolución lo ha determinado así.  
La ideología de género debe ser combatida porque construye un totalitarismo cultural, inadmisible en sociedades democráticas, por ejemplo: En la capital española, Madrid, circuló un bus que decía “los niños tienen pene y las niñas tienen vulva”, a los dos días la policía impidió que circulé dicho bus, so pretexto de discriminación hacia los homosexuales, lo sorprendente del suceso, fue la indignación de los cuatro principales partidos políticos: Podemos (izquierda neo marxista), PSOE (socialdemócrata), Ciudadanos (centro) y el Partido Popular (derecha). Los tres últimos, ya parecen sucursales de los neo marxistas de Podemos.
En España, ¿alguien protestó por la terrible discriminación que vive la mayoría católica? Nadie, ni el Partido Popular que es derecha y los gobierna desde el 2011. ¡Increíble!
No quiero que en mi país se impida circular un bus que diga la gran verdad: “Los niños tienen pene y las niñas vulva”, esto representa una batalla contra el adoctrinamiento sexual venido de la izquierda gatopardista. Ellos representan grande lobbies económicos, a favor de la agenda abortiva y del matrimonio homosexual.
Considero que el Estado peruano no tiene la facultad para (de) formar a nuestros niños, los padres son los únicos que deben y pueden formar a sus hijos, que lo hagan “bien” o “mal”, eso es otro asunto, al cual no me pienso inmiscuir porque respeto la intimidad familiar.
El Estado peruano debería generar más empleo formal, debería implementar políticas públicas contra la inseguridad ciudadana y sobretodo tomar acciones concretas sobre el Fenómeno de Niño que ha inundado ciudades costeras y emergentes como Tumbes, Piura, Chiclayo y Trujillo, en lugar, de pretender la adoctrinación de los niños peruanos.
P.D.1: El periodista peruano Álvarez Rodrich se ha atrevido a escribir en el diario La República que la marcha “Con mis hijos no te metas”, representa al “Ku Klux Klan peruano”. Tal afirmación me parece patética y risible porque el verdadero “Ku Klux Klan peruano” son ellos (la izquierda gatopardista) que se vendieron como prostitutas a los intereses de la dictadura venezolana de Chávez y Maduro, y a los gobiernos brasileños, clientelistas y corruptos de Lula y Dilma.

P.D.2: Tanto que querían a un Presidente “derechista”, ahora lo tienen y ese mismo “derechista” les implementó la ideología de género. Antes de votar, algunos peruanos deberían leer libros sobre ideologías políticas contemporáneas. ¡No me tienten a escribir un libro sobre ideologías políticas!