Mis
reflexiones sobre la investidura española.
Renatto
Bautista Rojas
Licenciado
en Ciencia Política por la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV).
Publicado en Mundiario con fecha 22/08/2016
A diferencia de mi país
(Perú), España es un régimen parlamentario – como la mayoría de países de la
Unión Europea - ; por lo tanto, el Congreso es quien otorga la investidura al
Presidente del Gobierno español.
Todos sabemos que el 20
de diciembre del 2015 hubo elecciones que no arrojaron una mayoría absoluta a
ningún partido político. Dicho proceso electoral rompió el bipartidismo entre
el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y el Partido Popular (PP), y
añadido, al surgimiento de dos nuevos partidos: Podemos y Ciudadanos, como
tercera y cuarta fuerza políticas españolas.
El 2 y 4 de marzo se
procedió a dos sesiones de investiduras, donde el candidato a Presidente, fue
Pedro Sánchez, líder del PSOE. Con la responsabilidad histórica de ser el
partido más longevo y representar a la socialdemocracia, el PSOE convergió con
Ciudadanos y Coalición Canaria. Dicha convergencia fue derrotada por el no del
PP y de Podemos, increíble que una fuerza de la derecha y de la izquierda
radical convergieran para cerrarle el paso al PSOE y así facilitaron unas
segundas elecciones (ocurridas el 26 de junio). El elector español debe
recordar que el 26 de junio se debió a la negativa del PP y de Podemos,
sobretodo, de Podemos. Era imposible que el PP votara por el PSOE.
Las elecciones del 26
de junio arrojaron resultados similares, que las pasadas del 20 de diciembre,
tanto el PP y el PSOE se mantuvieron como las dos principales fuerzas
políticas, pero sin mayoría absoluta para formar gobiernos en solitarios.
A diferencia del
proceso del 20 de diciembre, hoy Mariano Rajoy (Presidente en funciones) ha
aceptado el encargo del rey para la investidura.
La votación de
investidura está programada para el 30 de agosto. Hasta el día de hoy, el PP
está negociando con Ciudadanos para su voto afirmativo.
Si Rajoy logra el
consenso con Ciudadanos y Coalición Canaria tendría 170 votos, a 6 votos de
lograr la mayoría absoluta. Es sabido que el PSOE y Podemos votaran en contra
de Rajoy, lo cual me parece congruente.
A través del diario El País, se las grandes presiones que
existen sobre el PSOE para que ellos voten en abstención y faciliten la
investidura de Rajoy. El PSOE que es la opción del PP, haría mal en votar en votar
por la abstención, ellos tienen que votar no en la investidura, para ser
congruentes con sus electores. La congruencia en política vale oro.
Ante los escenarios
terroríficos que se plantean si Rajoy no llega a los 176 votos, hago recordar
que Ana Pastor del PP, se convirtió en Presidenta de la Cámara de los Diputados
gracias a los votos de Ciudadanos y a las abstenciones de los partidos
nacionalistas.
No me sorprendería que
el PP logré la abstención de los partidos nacionalistas, de esa manera, en la
segunda votación los resultados podrían ser: A favor de Rajoy: 170, en contra:
156 y abstenciones: 24.
En el caso de perder la
votación Rajoy, Pedro Sánchez, líder del PSOE tendría la obligación de formar
gobierno. La situación del PSOE es difícil porque sólo tienen 85 escaños, pero
pueden converger con Ciudadanos y Coalición Canaria, de esta manera, tendrían
118 votos. La clave sería Podemos que con sus 71 votos podría facilitar una
hipotética investidura de Sánchez, lo cual, es difícil porque Podemos es la
nueva versión comunistoide española, además, ellos han demostrado su
animadversión al PSOE, en las dos pasadas campañas electorales, como sus
severas críticas al gobierno de Felipe González (1983-1996), primer presidente
español venido del PSOE, luego de la cruel dictadura del general Franco.
En este escenario,
Sánchez obtendría 189 votos, en la medida que Podemos sin condiciones
mayúsculas (como un referéndum independista a Cataluña) le facilite la
investidura al PSOE.
Podemos siempre se ha
jactado de ser “progresista” y han
osado quitarle el espectro político al PSOE, lo cual, felizmente no lo han
logrado. En marzo su negativa a Sánchez y al PSOE posibilitó unas segundas
elecciones, esperemos que en esta ocasión no originen unas terceras elecciones
en diciembre. Si fuera así, les recuerdo que de diciembre del 2015 a junio del
2016, perdieron más de 1 millón y medio de votos, tal vez para diciembre del
2016 su caída electoral sería más catastrófica.
A pensar camaradas de
Podemos; por lo menos, ustedes son europeos y se supone que tienen mejor
educación universitaria que en nuestros países. No actúen como sus camaradas de
los países latinoamericanos.