Renatto Bautista Rojas
Doctor en Gestión Pública y Gobernabilidad, Magíster en Gestión de Políticas Públicas, Licenciado en Ciencia Política y catedrático nombrado en la Facultad de Derecho y Ciencia Política de la UNFV
Publicado en El Montonero, con fecha 10-12-2025
Ayer,
domingo 7 de diciembre se conmemoraron los 3 años del golpe de Estado
perpetrado por el entonces mandatario Pedro Castillo, felizmente para los
demócratas peruanos, que espero que seamos la mayoría silenciosa, no prospero
gracias a la oportuna reacción del Parlamento, tan denostado por los que
desprecian el voto popular, pero que en dicho momento histórico estuvo a la
altura de la circunstancia sumado a que las Fuerzas Armadas como las Fuerzas
Policiales no se prestaron al plan golpista del hoy preso Castillo Terrones.
Indudablemente, el vacado ex presidente no actuó solo, este plan golpista tuvo
dos aliados cercanos, los dos últimos presidentes del Consejo de ministros, los
abogados Torres y Chávez, la hoy refugiada injustamente en la embajada de
México.
Lo
cierto es que, si el golpe de Estado de Castillo y compañía hubiera funcionado,
el Perú hubiera tomado la senda del modelo agotado y caduco de la Cuba de Diaz
Canel, la Nicaragua de Ortega y su esposa la “copresidente” Murillo, y la
Venezuela de Maduro. Felizmente, que Castillo fue tan incapaz y corrupto que
este plan maquiavélico fracasó, sino otra hubiera sido la historia del Perú de
diciembre del 2025.
En
base a todo lo escrito, es válido hacerles recordar que el Ministerio Público,
por los delitos de abuso de autoridad, grave perturbación a la tranquilidad y
rebelión, ha pedido 34 años de prisión al vacado ex presidente Castillo. En
cambio, para la prófuga – refugiada ilegalmente Chávez ha pedido 25 años de
prisión, la igual que para el entonces ministro de Interior, Willy Huertas como
los oficiales policiales Lozada y Venero. Finalmente, la Fiscalía ha solicitado
15 años de prisión para Torres Vásquez, el penúltimo presidente del Consejo de
ministros del vacado Castillo, pero la Sala Penal Especial de la Corte Suprema,
de una manera groseramente benevolente, ha sentenciado al golpista Castillo 11
años, 5 meses y 15 días de presión efectiva, la misma sentencia recayó sobre la
fugitiva "mexicana” Chávez Chino mientras que al penúltimo presidente del
consejo de ministros de Castillo, Torres fue sentenciado a 6 años y 8 meses de
prisión a diferencia del ex ministro castillista, Willy Huerta que fue
sentenciado a 11 años y 5 meses de cadena suspendida.
A
modo de conclusión, consideramos que los golpistas del 7 de diciembre del 2022
no deben tener ni perdón ni olvido porque un terrible suceso como el analizado
aquí debe ser condenado con prisión efectiva por pretender quebrantar el
imperio de la ley en el Perú, desde nuestro punto de vista, la Sala de la Corte
Suprema ha sido benevolente con el golpista Castillo y su núcleo duro (Chávez,
Torres y Huerta) porque más de dos décadas en prisión.
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