Renatto Bautista Rojas
Doctor en Gestión Pública y Gobernabilidad, Magíster
en Gestión de Políticas Públicas, Licenciado en Ciencia Política y catedrático
nombrado en la Facultad de Derecho y Ciencia Política de la UNFV
Publicado en El Montonero, con fecha 24-11-2025
El
anterior artículo me permite continuar con la prospectiva respecto a la primera
vuelta de la elección presidencial del año 2026. Lamentablemente con esta ley
electoral que permite una atomización partidaria los resultados arrojarían que
4 o 5 partidos tengan la chance de pasar a la segunda presidencial, dichas
organizaciones políticas estarán rondando del 10% al 19%, lo más probable que
la diferencia entre el candidato que quedé en el segundo lugar con el tercero
sería de miles de votos además tendríamos un Parlamento bicameral muy atomizado
debido que el objetivo de muchos partidos políticos es pasar la valla electoral
del 5%, pero cualquier lector al leer este primer párrafo puede concluir que es
un análisis no tan prospectivo, pero en base a las animadversiones, complejos
de inferioridad y absurdos odios puedo hacer la siguiente prospectiva que la
segunda presidencial del año 2026 será entre un candidato que representé a la
ultra izquierda versus un candidato del centro derecha, que me atrevo a concluir
que sería la señora Fujimori porque Fuerza Popular tiene un nicho de electores
leales en base al “buen recuerdo” de las obras del gobierno de Fujimori padre.
¿Por qué hago esta prospectiva? El Perú es un país de ciudadanos que se quedan
en odios y resentimientos que una sociedad globalizada, como la Occidental, no
debería tener además el relato de la ultra izquierda sobre el preso Castillo,
lamentablemente desde nuestra óptica, ha calado en miles de miles de peruanos
que no aceptan que el 7 de diciembre del 2022 el golpista Castillo perpetró un golpe de Estado sumado a
que esos peruanos mal creen que a Castillo se le enfrentó por su fenotipo y su
manera de hablar tan simplona, cuando jamás a Castillo ni a Chávez ni a Torres
se les critica por su manera de hablar ni su origen fenotípico, se les critica
porque su administración fue absolutamente corrupta, ineficiente y fue un salto
al vacío representado por el socialismo, la ideología más criminal y fracasada
de la historia mundial, que ellos pretendieron aplicar el nefasto 7 de
diciembre del 2022 si su golpe de Estado hubiera salido con éxito que
felizmente por su opacidad intelectual no les salió de acuerdo al plan perverso
del Foro de Sao Paulo. Todos mis lectores, saben que estoy en las antípodas
políticas de Castillo y de sus aliados, pero debemos aceptar que existen 2’ 724, 752 de electores que votaron por
un partido de extrema izquierda como Perú Libre sumado a que, en la segunda
vuelta, aparentemente, yo sí creo que Perú Libre hizo fraude en
circunscripciones especificas en la sierra y selva, votaron por Castillo,
Boluarte y Cerrón 8’ 836, 380 de electores. Indudablemente, estos más
de 8 millones de peruanos no tienen perdón porque su voto fue a favor de un político
que llevó en su lista parlamentaria a un hoy condenado por terrorismo (preso
por 15 años) sumado a que el jefe de ese partido (Cerrón) es un señor con
enormes vínculos con la longeva dictadura comunista de Miguel Diaz Canel en
Cuba, el Foro de Sao Paulo y es prófugo de la justicia. Permítanme volver con
estos más de 8 millones de peruanos que votaron por una plancha incompleta
conformada por dos corruptos e incapaces totales como Castillo y Boluarte,
estos electores se dejan guiar por los odios avivados, como llamas de fuegos,
por esa costra llamada los caviares sumado a que estos electores, desde un
ángulo de la psicología, tienen enormes resentimientos sociales, uno de los
cuales es negar el absoluto fracaso del socialismo en la historia mundial,
incluyendo el fiasco más cercano que es la Venezuela chavista gobernada por
Chávez y Maduro, como quedarse en situaciones ya superadas como algunos abusos
padecidos en las haciendas de la sierra sur contra antepasados de estos
electores sumado al maniqueísmo de juzgar las dos administraciones de Alan
García y la década de los noventa de Fujimori como si todo fuera malo en dichos
periodos gubernamentales. Para ser más sincero, he conocido electores de
Castillo-Boluarte en la segunda vuelta que viven bien gracias a su “aterrados”
capitalismo, que ese sistema que tanto despotrican les dio la oportunidad de
estudiar en universidad, sumado a trabajar en una institución estatal donde
ganan medianamente bien es decir esos electores tienen una vida de clase media
sumado a que ese sistema económico que tanto despotrican les permite viajar por
algunas partes del país o del continente, pero vamos esos electores se quedan
en el pasado y en sus absurdos resentimientos por eso afirmamos que la
inteligencia emocional ni tiene relación ni con la edad y menos con los
estudios profesionales, indudablemente ellos tienen una vocación de ganado
ovino respecto al inmenso fracaso y perversidad que representa el socialismo en
nuestro continente. Por todas estas razones, consideramos que un candidato de
la ultra izquierda disputaría la segunda vuelta presidencial del 2026 con un
candidato del centro derecha, lo más probable como repito, sería la señora
Fujimori por eso nicho electoral leal del fujimorismo. Sinceramente, amo mucho
al Perú, espero equivocarme porque no mereces un escenario electoral como el de
abril del 2021 donde los tontos odios y absurdos resentimientos pudieron más
que salvar el sistema democrático como el sistema económico capitalista que
convirtió al Perú en la perla codiciada del Pacifico en este cuarto del siglo
XXI.